Rubén Albarrán decidió contestar a los insultos, memes y el hacerse viral por decapitar a un simipeluche que le lanzaron durante su concierto en Bélgica a través de sus historias de Instagram, pero no necesitó palabras de sí mismo para expresar su opinión, ya que sus fans lo ayudaron defendiéndolo diciendo que su acción estuvo bien “para que la simimanía acabara”.
Sin embargo, hubo una respuesta de una fan que justificaba a Rubén dando un poco más de contexto que el resto. La chica que compartió un video del momento viral en su historia comentaba que faltaba un poco de contexto sobre la reacción de Albarrán al ver el peluche de Dr. Simi.
“Ante falta de contexto, Rubén Albarrán es conocido por su profunda ideología y sentimientos hacia la Pachamama y la descolonización… Un Dr. Simi representa toda esa ondita enfermiza de las farmacéuticas…”, se lee en la historia que compartió el integrante de Café Tacvba.
- Medicamentos contaminan el medio ambiente
Tal como la fan de Rubén lo expresó, Albarrán se ha pronunciado múltiples veces como ecologista que lo único que busca es cuidar a “la Pachamama” (madre tierra) y el hecho de que “odie a Dr. Simi”, no es que odie al peluche como tal, simplemente está en contra de lo que representa ese peluche.
De acuerdo con investigaciones del medio ambiente, los residuos de los medicamentos farmacéuticos, tanto humanos como para mascotas, causan un impacto dañino en el ecosistema, ¿por qué?, bueno, explicándolo de forma simple es porque siempre que consumimos estos productos nos sobra un tres u ocho por ciento que al final terminamos desechando por el lavabo o el inodoro y de ahí llega al medio ambiente.
Pero eso no es todo, existen personas que consumen de forma excesiva e innecesaria varios tipos de medicamentos, que al no consumirse en su tiempo de vida son desechados casi completos y no se sabe exactamente a qué lugares llegan. Puede que sea en aguas, superficies o hasta en el aire.
Lo preocupante del caso, es que aunque su riesgo y toxicidad es baja, se ha vuelto evidente en los últimos años. Uno pensaría que los medicamentos se degradan fácilmente, algunos sí, después de ser consumidos, pero hay otros que sin importar que pasen por aguas residuales persisten, más cuando se trata de antibióticos, parasiticidas y estrógenos.
Estos medicamentos, que no se degradan fácilmente, han producido la muerte de población animal en el planeta de forma comprobada. Por ejemplo, hace poco en India se descubrió que el descenso en la población de buitres de la zona se debía a que estos terminaban envenenados por diclofenaco, un analgésico que se encontró en los cadáveres que consumían.
Pero no solo los animales se ven afectados, también los humanos, porque de acuerdo con análisis hechos en Europa, se encontró el uso de medicamentos veterinarios, de forma mínima, en los productos lácteos, que con el paso del tiempo puede causar daños a la salud del consumidor.
- ¿Qué se puede hacer para limitar el desperdició de medicamentos?
De acuerdo con expertos en el medio ambiente, a diferencia de decapitar peluches de Dr. Simi, podemos comenzar a gestionar mejor el consumo de medicamentos, evitando que queden residuos inutilizados o ver la manera de que las farmacéuticas ayuden en la recolección de envases con residuos o medicamentos inutilizables para que no se desechen en cualquier lado y se les dé el tratamiento correcto.
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