En Puerto Escondido, Oaxaca, un grupo de músicos fueron corridos de la playa “por hacer ruido”, hecho que generó la molestia de algunos turistas que reprochó el actuar de las autoridades en una actitud que fue comparada con Mazatlán, Sinaloa, donde se vive una gran polémica por el intento de prohibición de las bandas sinaloenses porque molestan a los extranjeros.
El episodio tuvo lugar en Santa María Colotepec donde un grupo de “inspectores” acompañados de policías municipales arribaron a la playa donde una agrupación de músicos amenizaba tocando para los turistas a cambio de ganarse una moneda.
Bajo el argumento que “hacían mucho ruido” pidieron a los músicos dejar la playa pública, situación a la que los propios turistas mexicanos se opusieron y reclamaron, ya que en el mismo lugar también había bocinas con música fuerte instaladas en los negocios.
Inmediatamente, el caso fue comparado con lo que se vive en las playas de Mazatlán, Sinaloa, donde hoteleros encabezados por Ernesto Coppel buscan prohibir las bandas de música sinaloense debido a que hacen mucho ruido y molestan a los turistas extranjeros, quienes tienen mayor poder adquisitivo y gastan más dinero.
Dicha situación volvió a avivar el debate sobre la gentrificación y turistificación en México, ya que muchas personas están en desacuerdo con que extranjeros vengan a vivir a nuestro país sin tener que pagar impuestos, haciendo que aumenten los costos de las rentas y ahora intentando cambiar las costumbres.
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