La exfuncionaria federal en el gobierno de Enrique Peña Nieto y exmandataria interina de la ciudad de México a finales de los 90, Rosario Robles Berlanga, recuperó su libertad luego de tres años de haber sido recluida en el penal de Santa Martha Acatitla, acusada por el delito de ejercicio indebido del servicio público.
Robles Berlanga permaneció recluida por mil ciento un días en el penal, hasta que la Fiscalía General de la República (FGR), decidió modificar las medidas cautelares a petición de la afectada y con ello recuperar su libertad, pero proseguir con el proceso desde su domicilio.
La exfuncionaria fue involucrada en una trama de corrupción conocida como “La Estafa Maestra”, uno de los mayores fraudes que se han fraguado en la historia de México durante el sexenio pasado, en el que estuvieron inmiscuidas once dependencias federales que aparentemente fueron utilizadas para desviar millones de pesos.
Dicha investigación fue generada y divulgada por el portal Animal Político en colaboración con la organización, Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), investigación que reveló una red desde el gobierno federal para desviar recursos públicos, dentro de esa red aparecieron tres dependencias clave, una de ellas era la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), dirigida por Rosario Robles, el Banco Nacional de Obras (Banobras) y Petróleos Mexicanos (PEMEX), esta última dirigida en aquel entonces por el ahora preso, Emilio Lozoya Austin.
De acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación (ASF), se detectó que el gobierno federal entregó recursos a través de convenios, también llamados subcontrataciones, a más de 180 empresas por un monto superior a los 7 mil 600 millones de pesos que constan en la cuenta pública de 2013 y 2014, sin embargo, en las investigaciones se detectó que al menos 128 de esas empresas no ofrecían las condiciones para dotar los servicios por las cuales habían sido contratadas y lo más preocupante, es que muchas de ellas ni siquiera existían.
Gastos sin comprobar
Los focos rojos comenzaron a rondar entonces cerca de la funcionaria de la Sedesol, quien poco después pasó a ser la titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), dependencia que también fue investigada por la ASF y señalada por participar en el esquema de contrataciones que derivó en el desvío de recursos públicos.
Los señalamientos alcanzaron a Robles Berlanga, debido a que la Auditoría Superior señaló que de las once dependencias del gobierno que estaban involucradas, la mayoría actuó como intermediaría, no así la SEDESOL y la SEDATU, secretarías a cargo de la exmandataria capitalina.
Derivado de esas auditorías, se reveló que existieron inconsistencias por alrededor de 2 mil 377 millones de pesos solo en el 2018, mientras que en el 2017 se generaron irregularidades por más de 3 mil 900 millones de pesos, en dichas irregularidades se vieron involucradas instituciones educativas públicas y más de 50 servidores públicos de distintos niveles de gobierno de la administración peñista.
Además de esos desvíos, la Auditoría Superior detectó un gasto superior a los mil 700 millones de pesos que no fueron reportados a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), sin que hasta el momento se sepa, para qué o dónde fueron utilizados esos recursos.
SEGUIR LEYENDO:
Rosario Robles: así salió de Santa Martha Acatitla la ex titular de SEDESOL | VIDEO
Rosario Robles es liberada, sale del penal de Santa Martha Acatitla: ÚLTIMAS NOTICIAS
FGR libra 83 órdenes de aprehensión contra involucrados en caso Ayotzinapa