El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, está por finalizar su mandato el próximo año, un año por demás atípico, ya que su sexenio concluye antes de lo planeado al menos hasta el anterior sexenio de Enrique Peña Nieto, es decir, finaliza el 1 de octubre.
El sexenio de López Obrador durará poco menos de 6 años y la causa de esto se debe a que así lo establece la ley en materia política-electoral tras una reforma aprobada el 10 de febrero de 2014, por lo que su mandato durará menos que los anteriores y en adelante para la próxima presidenta de México (al parecer), seguirá siendo igual con un periodo de seis años, concluyendo el primero de octubre de 2030.
En este contexto, el presidente informó que una vez que se retire a su rancho, cosa que ha manifestado una y otra vez, ante las constantes sospechas de la oposición por una supuesta reelección del mandatario, llevará a cabo una rutina normal de todo aquel que vive en su tierra (Tabasco), alejado de la política y de vez en cuando recibirá a su familia para algún evento, pero lejos de eso, su jubilación será total.
Entre varias cosas que el mandatario piensa hacer, además de escribir y leer, será disfrutar de un sabroso y frio pozol, que es la bebida originaria del sur del país, con base en maíz.
“Mi rutina va a ser levantarme temprano, como siempre, y caminar una hora, cinco kilómetros, espero que para entonces siga yo con ese ritmo, y luego al baño, desayuno, una o dos vueltecitas más, pero ya muy cortas, y a sentarme dos horas, dos horas y media” señaló López Obrador y continuó.
“Me levanto de la mesa de trabajo, camino, doy dos, tres vueltas, también no muy largas, me tomo un café, me tomo un pozol, dependiendo, me vuelvo a sentar hasta la una, una y media, que es la hora ya de la comida; caminar y luego de nuevo a sentarme a trabajar ocho horas, pero escribiendo, y acostarme temprano para levantarme también temprano, y así”.
“Desde luego, cuando hablo de caminar es ir viendo los árboles, la palma real, el guayacán, el maculí, la ceiba, ver si no tiene pudrición la guanábana; escuchar los pájaros, estar esperando en la mañana muy temprano que pasen las guacamayas, ver si tengo suerte que se posen en la copa de los árboles grandes…”, dijo el mandatario.
¿De dónde proviene el Pozol?
Al respecto, muchos se preguntan sobre la bebida que le agrada a López Obrador, el famoso pozol.
La historia del pozol comienza en la época prehispánica, donde los Maya- Chontales, que habitaban en el estado de Tabasco, preparaban una bebida a base de maíz y cacao a la que llamaban pochotl; esta era muy consumida por los viajeros indígenas ya que es nutritiva, hidratante y ayuda a mitigar el hambre.
Con el paso del tiempo, la bebida se extendió por el sureste de México y con la llegada de los españoles a territorio mexicano, el nombre pochotl se deformó a pozol.
Se dice que el pozol es una bebida comestible porque cuando la bebes también masticas el shish (palabra maya que significa resto o residuo), es decir, el asentamiento de la bebida; lo que permite calmar el hambre al mismo tiempo que hidrata.
Existen varios tipos de pozol, entre los que resaltan el pozol con cacao, el blanco y el agrio; estos a su vez tienen distintas maneras de prepararse según el lugar donde lo encuentres.