Seis estudiantes pertenecientes a la comunidad de la Universidad Latina de México fueron hallados sin vida en un paraje de la ciudad de Celaya en Guanajuato el pasado domingo 3 de diciembre, lo que causó indignación entre los estudiantes de la universidad y en la sociedad civil por la forma en que fueron asesinados, lo que generó ya respuesta por parte de las autoridades de la institución.
Fuentes cercanas al hallazgo, relacionadas con la Fiscalía General del Estado de Guanajuato, señalaron que los muchachos acudieron a una fiesta el pasado sábado 2 de diciembre en Querétaro, pernoctaron en esa ciudad y al salir por la mañana de regreso a Celaya, avisaron a sus familiares que ya estaban en la ciudad, sin embargo, al filo de las 14:00 horas una llamada al 911 alertó por el hallazgo de cinco cuerpos en un paraje localizado en la calle Lombardo Toledano y Albercas Don Cruz, todos ellos con impactos de bala.
Se trata de José Eduardo Freire Ortega, Bryan Jesús Amoles Gasca, los hermanos Jesús Virgilio y Fabián Orozco Mateos, su primo Pedro Francisco Mateos Puente, así como una sexta víctima cuya identidad aún se desconoce, pero que fue localizada muy cerca de los otros jóvenes, sin embargo, lo que los caracteriza es que todos ellos son alumnos de la Universidad Latina de México.
De acuerdo con autoridades de la Fiscalía General del Estado de Guanajuato, la unidad de homicidios ya está en el seguimiento de las investigaciones para identificar a los presuntos responsables y lograr su captura.
Exigen justicia
Los cinco estudiantes formaban parte de la comunidad de la Facultad de Medicina, hasta el momento no hay una razón por la que los jóvenes hayan sido asesinados, tampoco si hay un móvil con referencia a sus labores como estudiantes, sin embargo, el gobernador de Guanajuato, Diego Sinhue confirmó que dio indicaciones al secretario de Gobierno, Jesús Oviedo para mantener contacto con los familiares de los jóvenes.
Por su parte, el alcalde de Celaya, Javier Mendoza Márquez, lamentó la acción y pidió a las autoridades de los tres órdenes de gobierno, que impriman velocidad para dar con los culpables.
Se cree que los muchachos fueron asesinados en otro lado y después trasladados a las inmediaciones de la Universidad de Guanajuato, plantel Celaya, ya que los vecinos no escucharon detonaciones, algo raro porque el joven no identificado que fue localizado en el mismo paraje, pero fuera del auto, en que encontraron a los cinco muchachos, tenía una herida de bala.
La Fiscalía analizó la información de los teléfonos celulares y encontró que las víctimas estuvieron muy cerca del poblado de La Cruz y Santa Rosa de Lima, pero hasta ahora se desconoce si eso sucedió antes o después de que fueran asesinados.