En la cocina mexicana no debe faltar en ningún momento una buena salsa y si no se puede tener una, por lo menos debe existir un “chilito en vinagre” o seco, es un elemento casi indispensable para cualquier mexicano que se jacte de serlo y un objeto de deseo para cualquier mexicano en el extranjero.
Es por esa razón, que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), se dio a la tarea de investigar en sus habituales estudios comparativos sobre la calidad de los productos y las diferentes marcas que los ofrecen, cuáles son los chiles en vinagre de mejor y peor calidad para el gusto de los mexicanos y los resultados ya están a la vista.
De entrada, el estudio de la Profeco menciona que hay algunas marcas de chiles en vinagre en lata, que pueden ser dañinas para la salud, dicho estudio constó de un análisis de cinco marcas de rajas, además de chiles enlatados, y lo primero que saltó a la vista fue el alto contenido de sodio, mismo que se utiliza para conservar los alimentos dentro de la lata.
Y aunque el sodio es un componente químico que puede absorber el cuerpo, en exceso puede provocar daño arterial, hipertensión, enfermedades cardiovasculares y accidentes cerebrovasculares, es por esa razón que no se recomienda una alta ingesta de este.
¿Cuáles son los peores chiles enlatados según la Profeco?
La dependencia federal reveló que, de acuerdo con su estudio, la lata de rajas de chiles jalapeños de la marca Golden Hills resultó ser la peor en cuanto al contenido calórico, ya que contiene más de 600 miligramos (mg) de sodio por cada 30 gramos (g), lo que es sumamente dañino, ya que podrías llegar a consumir más de 600 mg de sodio con la ingesta de la lata.
También se especificó que cada lata de 380 gramos contiene hasta 7 mil 834 mg de sodio, lo que casi cuadriplica la cantidad recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que debe ser menos de 5 gramos (un poco menos que una cuchara de té) de sal por día.
El estudio marcó que después de los chiles de Golden Hills, siguen las rajas de jalapeños San Marcos con 576 mg de sodio por cada 30 g; La Morena con 465 mg por cada 30 g; La Costeña con 352 mg por cada 30 g y Clemente Jaques con 348 mg por cada 30 g.
Finalmente, tanto la Profeco como la Secretaría de Salud, coinciden en el detalle de que todas las marcas de alimentos deben contar con el etiquetado adecuado para saber cuál es la cantidad permitida de sodio, que es de 350 mg de sodio por cada 100 ml o 100 g.
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