Al menos 21 personas resultaron intoxicadas tras haber comprado enchiladas contaminadas a una vendedora ambulante en diferentes lugares del municipio de Huejutla, Hidalgo. Tras empezar a presentar diversos síntomas de malestar los afectados tuvieron que ser trasladados al hospital para su atención médica. ¿Qué tenían?
De acuerdo a medios locales, los casos de intoxicación se presentaron en inmediaciones de la central de autobuses, en la gasolinera Badillo y en el mercado municipal de esta comunidad huasteca, donde los comensales comenzaron a presentar fuertes dolores estomacales acompañados de diarrea y fiebre.
Intoxicación masiva por enchiladas contaminadas en Huejutla
El primer caso se dio entre un grupo de jornaleros que habían comprado las enchiladas en la gasolinera, luego se reportó otro a bordo de un autobús donde los trabajadores de pisca de tomate empezaron a sentirse mal por lo que la unidad tuvo que regresar a la terminal donde paramédicos de la Cruz Roja los atendieron.
Los testimonios de los 21 afectados coincidieron en que habían comprado enchiladas a la misma vendedora ambulante. Por tal motivo fueron trasladados a centros de atención médica para realizarles lavados gástricos, aunque un joven de 23 años se reportó como delicado, al igual que una mujer y un adulto mayor.
Hasta el momento se desconoce la identidad de la persona que vendió estos alimentos contaminados por lo que autoridades comenzaron a investigar con el fin de que se evita más la propagación de estos.
¿Qué tenían las enchiladas contaminadas en Hidalgo?
Al respecto, el director del Hospital Regional declaró a medios locales que la intoxicación pudiera ser por pesticidas conocidos como organofosforados, los cuales son ocupados para el control de plagas, tratamientos médicos e incluso como armas químicas. Sin embargo, las investigaciones continúan.
Los compuestos organofosforados contienen un enlace fósforo-carbono que se utilizan como insecticidas alternativos a los elaborados con hidrocarburos. Estos químicos son absorbidos por los insectos al momento del contacto provocando fallas en el sistema nervioso, por lo que son considerados altamente tóxicos.
Sin embargo, sus efectos no se limitan a los bichos ya que también puede afectar a humanos e incluso han sido ocupados como armas químicas como es el caso de los gases nervioso sarín, el cual afecta en bajas dosis el sistema nervioso y es letal.
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